viernes, agosto 14, 2009

Villatoro - Valdehierro

por: Zerolito

La verdad es que después de las Fuentes del Adaja me encontraba bastante cansado. Supongo que tuvo que ver con la premura con la que tuve que afrontar la vuelta, con los últimos km corriendo sub 5'/km. El caso es que estaba muy cansado y esperé hasta el viernes para hacer la última escapada. Iba a ascender por unas zetas muy claras a los primeros cerros cuya cuerda me llevarían a la Serrota (para otra ocasión, ya que salen una buena purrela de km) y ya veríamos.

El caso es que me levanté absolutamente destrozado. Dudé incluso sobre el asunto de salir, pero resulta que mi cuñado también iba a hacer un recorrido similar en la bici y me animo a trotar algo. De inmediato las sensaciones son horrorosas, incapaz de llevar un ritmo suave y sostenido en el llano. Además empieza a hacer un calor sofocante... ¡a las 9 de la mañana! Así que me entretengo llaneando sin atreverme a atacar las zetas.

¡Pero esto no puede ser! Ya llanearás en Madriz. A subir las zetas ahora mismo, así ganarás altura y estarás mejor. Hay veces que mi Pepito Grillo es así de contundente. Así que decido tirar en dirección Este y coger las zetas que comienzan, cómo no, tras una verja de Prohibido el Paso. Total, las haré andando, y dejar de correr me parece ahora mismo un regalo.

Tristemente no llevo la cámara. Según voy ganando altura las vistas sobre el Valle del Amblés son más y más espectaculares. El bosque de pinos que voy bordeando empieza a mostrarme rocas graníticas, algunas sorprenden por su tamaño. Me lamento una vez más de no llevar la cámara.

El desnivel de las zetas es brutal. Según el gráfico del km 2 al 4 subimos 150m, pero del 4 al 6 son 250m. Según el CompeGPS de mi cuñado había rampas que superaban el 30% de desnivel. Lo bueno es que se trata de una pista forestal, con lo que el peligro de torceduras y despeñes se reduce al mínimo y nos ofrece la oportunidad de contemplar el paisaje. Aún así el ritmo que llevo es bueno, siempre superior a los 5km/h. Poco a poco voy alegrándome de no haber hecho pereza.

En el último tramo las zetas se dibujan en la ladera alargadísimas, ya superado en altura el primero de los pequeños cerros que jalonan la cuerda hasta el Cerro de Valdehierro. El paisaje pierde los pinos pero gana en granito. La roca descubierta y erosionada, con unas formas redondeadas y curiosas, me empiezan a recordar a la Pedriza por su tamaño y aspecto. Aunque en conjunto el paisaje es más bien tipo Torrelodones: escarpado, con rocas dispersas aquí y allá, con bastante arbusto y pequeños pinos aislados. ¿Os he hablado de mi cámara?

Cuando casi corono el primer cerro miro para abajo y veo a lo lejos a mi cuñado en la bici. Le hago señas pero ni me ve ni me oye. Pensé erróneamente que me alcanzaría pronto, así que me pongo en marcha y llego a la cuerda. Pero el camino sigue, ni en Sigpac ni en CompeGPS estaba marcado, pero ahí está con ancho suficiente para que pasen dos coches, eso sí, con mucho cuidadín. Y estamos arribota. Paso al otro lado de la ladera y contemplo el puerto de Villatoro y el camino a las Fuentes del Adaja que recorrí el otro día. Estoy a unos 1600m de altitud y se está de maravilla, con unas vistas realmente sorprendentes a ambos lados de la ladera. Y las vistas en la cuerda tampoco están nada mal, con la Serrota apareciendo y desapareciendo como queriendo jugar al Pilla-Pilla... "¿A que no me coges?", me suelta así de resuelta."Te libras porque no he madrugado", la digo.

Sigo por la cuerda hacia lo que parece un pluviómetro, ya mirando al valle del Amblés. En ese punto la pista forestal se torna en un camino con dos rodadas de coche, perfectamente transitable. Veo que llevo 9.5km y me debato en seguir subiendo o volver. La cuerda está ahí, esperando. Un poquito más y llego al Cerro de Valdehierro, que queda a escasos 12m de tener el honor de ser un dos mil. El precio es salvar un desnivel de 230m en un kilómetro. Pero es que desde allí se plantean unos pocos retos más: Peña Pajarita, con 2131m, en línea directa y casi llaneando con la del Belesar (2151m) que está a escasos 2km de la Serrota (2292m). Así que decido dejar la ascensión para otra ocasión, quizá acompañado de mis recordados Carlos o Yoku.

Emprendo viaje de regreso tras comerme una barrita y en el mirador donde paré para ver el otro lado de la ladera me encuentro a mi cuñado. Está disfrutando de la misma vista que yo, y se le ve feliz. "Fíjate de lo que estamos disfrutando aquí arriba y que tanta gente se pierde", me dice. Y no puedo sino asentir, no sin recrearme otra vez del espléndido panorama. Somos unos privilegiados. Y yo sin cámara, ¿lo he dicho ya?

Me despido ya que él va a continuar el viaje. Ahora toca el descenso por las zetas, que es increíble. A pesar del cansancio voy cogiendo velocidad crucero de entre 4:30 y 4:40/km. Y sin peligro salvo en los codos de las zetas, en los que hay que ir con cuidado. El firme ancho y en buen estado te permite bajar con comodidad, fijándote en el paisaje (lo justo, no vayas a esmoñarte por no mirar el suelo) y ganándole la batalla al reloj, si es que alguna vez hubo alguna.

Bajo directamente al pueblo y subo la cuesta de propina. ¿Por qué será que siempre tengo que subir un desnivel brutal antes de volver a mi casa o a cualquier casa a la que vaya de vacaciones? Al final ha sido una salida estupenda, cómo me alegro de haber vencido a la pereza una vez más.

Ya en casa, mapa en mano, debí quedarme a escasos 5km de la cima de la Serrota. Haciendo el recorrido sin el despiste del principio serían 12km de ascensión y otros 12 de bajada al pueblo, perfectamente asumible. Así que ahí queda, para otra ocasión, perfectamente planificada. La bajada por las zetas es realmente fácil y gozosa, y permite recuperarse de la paliza de la ascensión.

Ficha técnica:

Distancia: 15.75km
Tiempo: 1:55:44
Altitud mínima: 1175m (Villatoro)
Altitud máxima: 1755m (cuerda camino de Valdehierro)
Desnivel: 625(+) 625 (-), 1250m acumulados


Recorrido según Sporttracks & Google


Altimetría según Sporttracks

1 comentario:

Anónimo dijo...

"Somos unos privilegiados".

Eso es todo y no hace falta decir más.

Esa zona es para mí totalmente desconocida. Espero que me sirvas de guía alguna vez.